sábado, 27 de diciembre de 2014

"El Destino Fundamental".

El Gran Inconsciente esta fuera del tiempo y del espacio
                                             y solo quiere que estemos absolutamente felices, 
                                             que nos realicemos y que seamos lo que Somos.

Después de una meditación matinal encuentro esta pregunta en mi mail 
¿Todo está escrito en esta vida o podemos modificar nuestro destino? 
Por supuesto que no soy nadie para dar una respuesta definitiva, pero estas 
son algunas de las sugerencias que mandé a esta persona.
Puede ser que existan variaciones infinitas de un mismo “destino” en una infinidad de 
universos paralelos. Considerar esto nos abre la mirada en el sentido que dejamos
de sentirnos tan fijados en nuestro pequeño “yo”.
Dejar que coexistan las dos opciones a la vez: todo esta escrito. 
Tenemos un karmala ley de la causalidad supone que cada acción 
produce un efecto, etc. Y tenemos libre albedrio, en cada momento mi acción
puede ser justa o no-justa, según como actúo se modifica mi destino, etc.
Considerar que cuando dices “destino” se presentan tres niveles de comprensión del 
“destino”. Uno es el nivel consciente, y tiene que ver con el poder personal: 
voy a luchar, o voy a actuar amorosamente, o voy a montar trampas, o lo que sea, 
para conseguir lo que siento que es justo para mi aqui-ahora. Es el nivel de la acción deliberada, 
la cual puede ser totalmente lucida pero también totalmente ciega 
(por ejemplo Hitler ordeno deliberadamente la matanza de millones de personas).
El segundo nivel es psicológico: trata de nuestra formación pasada, de todo 
lo que nos maneja desde la educación y las huellas del árbol genealógico. En este sentido,
podemos decir que el hecho de trabajar para aclarar lo que yace en el inconsciente
individual y familiar es una forma de modificar un destino. Por ejemplo y simplificando 
mucho: si te dan el nombre de tu abuela, tendrás cierta tendencia irresistible 
a cumplir parte del destino de tu abuela, a menos que te hagas consciente de ello,
en cual caso quizás el inconsciente siempre te empujará a actuar mecánicamente desde 
la repetición, pero ya no estarás tan manejada por ella. Metafóricamente, 
la repetición familiar es como la atracción terrestre: algunos la padecen con torpeza, 
y otros bailan utilizándola como acróbatas.
Y por fin, considera el Gran Inconsciente (o consciencia dios interior, Atman, etc.) 
o “supra-consciente” (como lo llamaba Sri Aurobindo). Podríamos decir que este es nuestro Destino fundamental. El Gran Inconsciente esta fuera del tiempo y del espacio, solo quiere
 UNA cosa: que estemos absolutamente felices, que nos realicemos, que Seamos lo que Somos.

Marianne Costa.