miércoles, 27 de julio de 2011

Doña Magdalena: El Pensamiento Mágico.


Alejandro Jodorowsky:

Las personas que te impiden ser tú mismo en tu familia son tu prisión; las partes de tu ego que te impiden ser tu ser eterno son prisiones. Convertirse en matriz y después ser lo que se es, a pesar de todo y todos, es la necesidad esencial.
Ahora, sabiendo que en ti vive nuestro Dios-Diosa, vas a ser su hijo. Aquel que escucha al interior y al exterior… y que es todo al mismo tiempo.

El hijo es el padre y la madre al mismo tiempo. Es el andrógino. Y vas hacia el interior y hacia el exterior, hacia la acción y tocas la unidad de tu ser. No estás en el interior, no estás en el exterior, estás en el interior y en el exterior, estás en todas partes. Si trabajas bien esto, vas a sentir una sensación muy energética.
Estás en comunicación con la profunda materia. Te sientes un ser cósmico. Todo lo que pasa en tu interior, lo lanzas al exterior, tiene repercusión en el exterior. Si una idea llega a tu espíritu, esta idea llega enseguida al mundo. No hay ninguna diferencia entre la acción que haces en el interior de ti y el resultado y el hecho que se produce, en ti y en el mundo, puesto que tienes una unión. Todo lo que pasa en el mundo llega a ti. Estás conectado con todas las acciones del mundo. Todo lo que llega, en el pasado, en el futuro y en el presente, está conectado contigo. Eres un ser cósmico conectado. Y todo lo que pasa en tu interior es completamente exterior y eso puede mover las galaxias. Los seres que han tenido una significación en la humanidad pueden crear manchas en el sol. Las manchas en el sol van a cambiar el tiempo y la actitud de los seres humanos. La humanidad es esencial para la vida del planeta, la vida del planeta es esencial para el sistema solar, el sistema solar es esencial para la vida de la galaxia. Cuando un ser humano viene a cambiar la humanidad, es ayudado por el sol, porque no hay diferencia entre él, el sistema solar y todos los astros. Cuando un ser llega a la perfección, cuando una luz llega a la raza humana, esa luz cambia el desarrollo de la consciencia universal. Luego nosotros podemos muy bien, si progresamos, actuar sobre el sistema solar.

Acepta la unión con los astros. No solo las estrellas actúan sobre nosotros sino que nosotros actuamos sobre las estrellas. Y eso va y viene. Tu puedes actuar sobre las estrellas. Todo cambio humano se hace en grupo. Si un grupo empieza a trabajar, cambia el sistema humano, luego cambia el sistema galáctico.

Estás actuando en el interior de tí, y al mismo tiempo estás actuando en el exterior de ti. En este momento ya no estás totalmente solo, estás en unión completa con el cosmos y la divinidad, porque estás en el interior de ti y en el exterior al mismo tiempo. Tus acciones no son sólo para ti. Has vencido todo egoísmo. Los más antiguos sabios de la humanidad han trabajado con esta meditación. Esta meditación es milenaria.

Siente bien tu cuerpo. Estás al mismo tiempo al exterior de él y al interior de él. Y el exterior es activo y el interior es receptivo. Ahora cambia. El exterior es receptivo y el interior activo. Ninguna diferencia entre tu cuerpo y el cuerpo de los otros y el cuerpo de mundo. No hay ninguna diferencia.

No hay ninguna diferencia entre tu sexualidad y la sexualidad del mundo. Tu sexualidad interior es la sexualidad de las plantas, de los minerales, de los animales, de las entidades celestes e invisibles, de las fuerzas que se mueven y que conducen la vida en el universo, en el cosmos. Tu sexualidad no es solamente tuya. Cuando transformas tu sexualidad interior, transformas también la creatividad exterior. Comenzar a crear significa comenzar a crear en el universo. Toda creación, toda fuerza universal llega a mi creatividad también, no hay diferencia. Eso se llama la sexualidad cósmica.

Tus sentimientos son los sentimientos de toda la humanidad y de todo el universo. Tu dolor es el dolor de los otros, y tu alegría es también la alegría de los otros, el amor de Dios-Diosa es también de los otros, el amor del universo es también de los otros. No hay sentimiento personal, no hay posesión.

Tus ideas son las ideas de los otros, del universo. Todo lo que dices ha sido creado por el universo. Nada es tuyo, salvo los errores. Si hay un error es una mala comprensión de la ley universal. Si quieres la luz, quiérela para los otros. Si así lo haces, todo lo que los otros encuentran es para ti, el genio de los otros es tu genio, los descubrimientos de los otros son tus descubrimientos.
Aprendo a admirar y a aceptar el valor del otro, porque el valor del otro es tu valor. Y aprende a admirar y a aceptar tus valores. Comprendes lo que es la totalidad. Estás unido totalmente a todo. Todo está unido a ti, tú estás unido a todo. El universo eres tú. Llevas en ti el pasado y el futuro de la humanidad. Es la unión. Se acabó la separación. Es el andrógino el que termina con la separación.

Tu centro está vacío y todo tú irradias hacia el exterior. Irradias hacia el mundo, y recibes del mundo. Es tu vacío lo que atrae todas las fuerzas del exterior hacia ti. Es una petición formidable. Pides a la tierra, pides al agua, pides al fuego, pides al aire, pides a la bendita consciencia universal, la absorbes hacia tí. Te unes a la tierra para poder recibirla: sientes que tu cuerpo se abre como una flor y te unes con todos los cuerpos que existen. Y después te unes con todos los pensamientos del exterior, con todas las consciencias que están al exterior.

Cuando pides, estás en la luna negra, porque tu interior es negro y la luz está al exterior, y tú la recibes. Y eso es porque antes te has vaciado. Cuando la matriz se vacía, recibe todas las fuerzas del exterior. Ahora respira profundo, como si absorbieras al cosmos entero. Te sientes lleno. Eres la luna llena. Tienes un tesoro interior que va a expandirse por el mundo.

Siente bien tu materia como una cosa pura, la materia de tu cuerpo, de tu sangre, de tus huesos, de tus vísceras, de tus cabellos, de tus pensamientos, de tus deseos. Todo está en pureza. Ofreces al mundo una materia pura.

Deja entrar en tu cuerpo un aire puro, respira puramente. Siente que los latidos de tu corazón son puros, que tu carne no es el producto del pecado. Es un producto puro aceptado por Dios-Diosa y por la vida. Ni siquiera tus excrementos son sucios, no hay nada de sucio en tu cuerpo.

Estás vacío de crítica, de malos pensamientos, de sentimientos negativos, de deseos destructivos, de acciones negativas. Pero este vacío es rico y contiene todas las posibilidades de crecimiento. Estás lleno de posibilidades que se van a abrir. Eres un ser en potencia, rico. Y ahora ve si reconoces tu riqueza interior. Mira si eres un ser vacío sin riquezas o si eres un ser rico que puede dar. Tienes mucho para dar.
No se sabe todavía lo que se va a dar ni cómo, pero se tiene la posibilidad del don en nosotros. Vas a dar. Y dando vas a crecer.

La única manera que tienes de dar es a través del amor, a través del corazón, a través de lo emocional. Es el primer paso a franquear. ¡Abro la flor de tu corazón! Haz una entrega al mundo sincera, clara, sin disimulos, ningún misterio, nada está escondido, todo está abierto. Es pureza. Una vez que no escondes nada, el agua, la vida, vienen a ti puras. Y puedes ofrecer de beber a los otros seres. Recibes toda la pureza, toda el agua, pero enseguida la das. Puedes ofrecer y eso hace que seas bendecido. Es el agua bendita lo que recibes, por tu santa acción.

¿Y cual es tu acción? Hijo querido del alma, repite estas palabras conmigo: “Mi carne, yo la acepto, me vacío de pasiones, acepto toda la creatividad que hay en mí sin finalidad, abro mi corazón, a través de la apertura del corazón me abro a la luz de la pureza, me expongo completamente desnudo, sin defensas, y por el hecho de que dejo de defenderme, recibo lo más puro de mí mismo. Y puedo ayudar, comunicarlo. Reconozco la vida y agradezco”.

Imagen: Discover the cosmos!.
Plano Creativo.